PODCAST
Tomando nota
Septiembre 29th, 2011
Salmos 106:40-48
Puede ser una exageración hacer esta conexión, pero tengan paciencia conmigo, creo que es posible. Hay algo en común con el Salmo 106, donde Dios escucha el clamor de la gente, y en Santiago 5:16, donde se nos dice que nos confesemos unos a otros y seremos sanados. El punto en común es que las personas revelan a Dios y a los demás lo que hay en sus corazones. El punto en común es la confesión. Dios escuchó el clamor de su pueblo. Santiago nos dice que al declarar, o confesar, se hace posible nuestra verdadera liberación.
En la antigua iglesia cristiana, la confesión es un sacramento, un medio por el cual experimentamos la presencia de Dios. John Wesley usó ese pensamiento con sus grupos celulares, e hizo que los participantes comenzaran diciendo: “El estado de mi corazón es…”. Y la persona declaraba gozo o temor, o pecado o angustia, o esperanza o lo que fuera que hubiera allí.
Vivamos en confesión ante Dios y los unos ante los otros hoy.