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Nuestro Dios Misericordioso
Julio 28th, 2011
Deuteronomio 31:30-32:11
Bienvenido a Reflejando a Dios.
Nos dimos cuenta que necesitábamos puertas nuevas para la casa. Colocar puertas nuevas en una casa vieja puede ser difícil y costoso. Cada tarde, durante los devocionales familiares, oraba para que el trabajo se realizara sin problemas y sin gastos adicionales. Un joven carpintero de nuestra iglesia instaló las puertas en su día libre, sin ninguna dificultad. Me alegré tanto y le dije a mi esposa, “No puedo creer que salió tan bien. Estoy tan sorprendido”.
Ella respondió, “No sé por qué estás tan sorprendido. Has estado orando por esto desde hace días”. Nuestro Dios es generosamente bueno. Él responde nuestras oraciones aún cuando no vemos una solución.
Sólo había una forma de salvación para que Israel sobreviviera. No era su fuerza militar; eran una nación pequeña. No era porque eran justos; eran pecadores. No esperaban que Dios atendiera sus oraciones, pero Dios escuchó –y contestó. “¡Alaben la grandeza de nuestro Dios! Él es la Roca, sus obras son perfectas, y todos sus caminos son justos”.
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