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Sin ley
Octubre 25th, 2025
1 Timoteo 1:3-11.
Nos guste o no, la humanidad sería un caos sin reglas y regulaciones. A menudo surgen nuevas reglas y advertencias debido a una necesidad o situación específica. ¿Alguna vez ha observado un letrero o etiqueta y se ha preguntado qué provocó la necesidad de esa advertencia? Las redes sociales ocasionalmente comparten imágenes de tales avisos. Recuerdo uno que advertía a los visitantes que no se tomaran selfies con la vida silvestre. Otro advirtió a los usuarios que no plancharan su ropa mientras la usaban. ¡Otro advirtió a los usuarios que no operen un secador de pelo mientras duermen!
En la primera carta de Pablo a Timoteo, habla de las leyes. Menciona que los justos no tienen necesidad de leyes, pero los injustos sí. Dado que todos hemos pecado y no tenemos medios para lograr nuestra propia redención, necesitamos saber dónde se encuentra la línea entre el bien y el mal. A veces esa línea es borrosa.
Afortunadamente, servimos a un Dios que no desea que fracasemos. No solo envió a Su Hijo para proporcionar redención, sino que también envió al Espíritu Santo para ayudarnos a navegar esas situaciones difíciles. Depende de nosotros hacer del acercamiento al Padre una prioridad para que podamos tomar decisiones que se alineen con Su ley.
Autor: Andrea Talley
