PODCAST
Diferentes potencias
Julio 15th, 2025
Hechos 1:6-11.
Este pasaje comienza con los discípulos, una vez más, sin entender el propósito de Jesús. Querían que le devolviera el poder político a su pueblo (v. 6). Jesús pacientemente redirigió su enfoque. Recibirían poder, pero no sería el tipo de poder con el que estaban familiarizados. Sería el poder traído por el Espíritu Santo para ser testigos (v. 8).
¿Qué significa esto? Ser testigos de un Dios que se sacrificó por amor a nosotros significa que vivimos con la voluntad de sacrificarnos. ¡A través del poder del Espíritu Santo, podemos hacer eso! En Efesios 1:18-20, Pablo ora para que el pueblo de Dios entienda ese tipo de poder. En 2 Corintios 12:9, leemos que el poder de Dios se perfecciona en la debilidad.
El poder de Dios no es solo una versión más grande de nuestro poder. El poder de Dios está conectado con el amor, el sacrificio y la curación. Entonces, cuando leemos sobre la ascensión de Jesús al cielo y sabemos que algún día Él regresará, entendemos que nuestra responsabilidad como testigos es vivir en el poder del Espíritu.
Somos empoderados por el Espíritu para vivir una vida de amor, sacrificio y sanación. ¿Cómo puedes vivir en ese poder hoy en día?
Autor: Deanna Hayden