PODCAST
Justo a tiempo
Octubre 24th, 2024
Ester 4:9-17
Hace un par de años, decidí convertirme en maestra sustituta en la escuela de mi comunidad local. Fue una excelente manera de apoyar a mi escuela local. Fue un torbellino de educación para mí cuando me metí en el papel.
Una de las conclusiones más memorables de mi tiempo como suplente fue la importancia del tiempo. Para ser más precisos, siga el horario al minuto. Verás, caigo en la categoría de las personas que llegan “tarde” si no llegan temprano. Me presentaba a cada clase de la universidad 10 minutos antes de la hora de inicio. No puedo llegar a tiempo y sentir que llego a tiempo. Necesito adelantarme a los tiempos.
Eso no funciona en el aula. Descubrí esto cuando llevé a mi clase de segundo grado a la sala de arte y llegué cinco minutos antes de la hora oficial programada. Llegué demasiado temprano y la maestra estaba terminando con otra clase. Aprendí que los maestros se refieren exactamente a la hora que programan. Ni un minuto más ni menos.
Dios llega a tiempo, todo el tiempo. Aunque no lo parezca, Dios nunca llega tarde ni demasiado temprano. Dios llega a tiempo. Confía en Su tiempo.
Autor: Stefanie Hendrickson