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Obediencia definitiva

Julio 13th, 2024

Hebreos 5:5-10

Es común que los creyentes pasen por dificultades y oren a Dios por liberación. Es posible que no pensemos a menudo en Jesús clamando a Dios, Su Padre, por liberación, pero eso es exactamente lo que sucedió.

Cuando Jesús nació, debe haber parecido un niño normal a pesar de las circunstancias milagrosas de su concepción. No sabemos mucho acerca de los primeros años de Jesús, pero sí sabemos que incluso a los 12 años de edad, Él mostró una visión de la Palabra de Dios que asombró a los eruditos más eruditos de Su época. En Lucas 2:49, después de que sus padres lo descubrieran conversando con los ancianos en los atrios del templo, Jesús le respondió a su madre diciendo: “¿No sabías que tenía que estar en la casa de mi Padre?”

Cuando se enfrentó al conocimiento de su muerte venidera, Jesús nos dio un ejemplo a todos nosotros al clamar fervientemente en oración a su Padre (Hebreos 5:7). Aunque Jesús no fue librado de la muerte, “aprendió la obediencia de lo que padeció […] y se convirtió en fuente de salvación eterna” (vv. 8-9).

Autor: Kelly Brown