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Los Testigos
Marzo 25th, 2024
1 Corintios 15:1-8
Es asombroso lo simple que es el evangelio. En la carta de Pablo a la iglesia de Corinto, señala su posición sobre el evangelio. ¡Él transmitió la palabra y los creyentes corintios la recibieron!
Cristo murió por nuestros pecados de acuerdo con las Escrituras Judías.
Jesús fue sepultado.
Al tercer día, resucitó.
Jesús se aseguró de que hubiera testigos.
En otras palabras, esta esperanza no era un cuento de hadas repetido. Esta esperanza fue predicha hace mucho tiempo.
Es posible que los que leemos el Nuevo Testamento no hayamos recorrido el camino de Emaús, charlando con Jesús durante kilómetros sobre el cumplimiento de las Escrituras; sin embargo, sí tenemos testigos de los acontecimientos que rodearon la muerte y resurrección de Jesús. El soldado que vio desaparecer el sol fue testigo de ello. El soldado que alanceó a Jesús en el costado fue testigo de ello. El centurión, aterrorizado por el terremoto, dijo después: “¡Ciertamente era el Hijo de Dios!” (Mateo 27:54) fue testigo de ello. Cuando la cortina se rasgó y las piedras temblaron, ¡los sacerdotes en el templo lo presenciaron! Nuestra esperanza está en sus testimonios.
Autor: Christie American Horse
