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Mi casa, mis reglas
Septiembre 25th, 2023
2 Crónicas 33:1-9
Los buenos padres, como Dios, quieren lo mejor para sus hijos, incluso a costa de sacrificar sus propias preferencias. Los buenos padres, al igual que Dios, establecen límites y reglas de la casa consistentes. Las reglas de la casa se establecen para la salud, la seguridad y la paz de los que están en el hogar. Desafortunadamente, incluso los mejores padres no pueden tomar todas las decisiones por sus hijos. A veces, las decisiones que toman los niños traen tristeza, ira y angustia a sus padres bien intencionados. . . al igual que Dios.
El padre del rey Manasés, Ezequías, llevó una vida piadosa que incluyó algunos de los milagros más grandes del Antiguo Testamento. A pesar de ese ejemplo viviente de buenas decisiones morales y de la instrucción de las leyes de Dios, Manasés tomó sus propias decisiones. Inventó sus propias reglas, su propia religión. Hizo caso omiso de las reglas que Dios estableció para el templo del Señor.
Cuando las leyes de Dios son ignoradas, o descaradamente rechazadas, las almas podrían perderse. Saber que las “reglas de la casa” de Dios son para el bien de los hijos de Dios debería inspirarnos a seguirlas con gratitud.
Autor: Chad Garinger