PODCAST
En todas las personas
Mayo 23rd, 2023
Hechos 2:14-21
Estoy casada con un pastor. Esa declaración es un desafío para algunas personas, porque soy hombre y mi cónyuge pastor es mujer. Recuerdo a un miembro de la junta de la iglesia en una de las iglesias que co-pastoreamos. Durante una revisión pastoral, le dijo al Superintendente de Distrito: “Cuando escuché que estábamos recibiendo una mujer predicadora, pensé: ‘Esto va a tomar un tiempo para acostumbrarse’. ¡Me alegro de haberme acostumbrado!”
Mi esposa está viviendo una de las promesas de Pentecostés: que en estos últimos días, cuando el Espíritu de Dios sea derramado, nuestros hijos e hijas profetizarán, e incluso hombres y mujeres siervos profetizarán (Hechos 2:17-18). Jóvenes y viejos, hombres y mujeres, esclavos y libres… Seguro que suena como si en este pasaje todo tipo de personas fueran llamadas a hablar la Palabra del Señor. Este llamado, y este hablar, sucede solo a través de los dones otorgados por el Espíritu, y resulta que el Espíritu puede ser derramado sobre todos.
¡Estoy muy agradecida de ser parte de una tradición de fe que reconoce estas verdades!
Autor: Mark Hendrickson